Philip Wells Woods nació en Springfield, Estado de Massachussets, en 1931. Tomó lecciones de saxofón en su ciudad natal y, tras graduarse a los 16 años, se trasladó a New York, donde estudió con Lennie Tristano, en la Manhattan School of Music  y en  el Juilliard Conservatory. Sus primeras influencias como jazzman fueron Benny Carter, Johnny Hodges y Charlie Parker. Trabajó en diversos grupos, como el de Jimmy Raney o la orquesta de Charlie Barnet antes de incorporarse a la Big Band de Dizzy Gillespie en 1956. Entre 1959 y 1961 formó parte de la banda de Quincy Jones, con la que permaneció en Europa durante un año. En 1962 se incorporó a la Banda de Benny Goodman para la primera gira por la entonces Union Soviética. A mediados de los cincuenta, Phil dirigía ya sus propios grupos, con los que grabó para discográficas de gran relieve, como Prestige. Simultaneó dicho trabajo con una amplia actividad como músico freelance, trabajando junto a Billie Holiday, Bill Evans, Michel Legrand, Oliver Nelson, Thelonious Monk y muchos otros.

En 1968 se afincó en Europa, donde organizó la European Rhythm Machine. El grupo actuó con gran éxito en Europa hasta que, en 1973, Phil decidió volver a los USA, afincándose en primer lugar en Los Angeles, para volver mas tarde a New York.Durante los años setenta y ochenta, Phil ha trabajado casi exclusivamente al frente de su propio cuarteto, transformado posteriormente en quinteto con la adición del extraordinario trompetista Tom Harrell, del que Phil fué el auténtico “descubridor”. En los noventa, Phil Woods disfruta de la notoriedad bien ganada tras años de trabajo. Cuatro Grammys e innumerables otros premios recibidos a lo largo de estos últimos veinte años le han colocado consistentemente entre los Jazzmen mas apreciados por público , crítica y sus propios colegas.Una técnica irreprochable, un sonido de rara perfección tímbrica, una imaginación ilimitada en la construcción de sus solos y, en general, un rigor en sus concepciones musicales caracterizan a este ya legendario Jazzman, sin duda el más brillante saxofonista alto de su generación.

Phil Woods